Las pantallas táctiles se han adueñado de todos los aspectos de nuestras vidas. Actualmente, probablemente sean más utilizadas que otros sistemas de entrada tradicionales como teclados físicos y ratones. Los sistemas táctiles han alcanzado tal popularidad que es difícil encontrar a una persona no haya utilizado uno de ellos. Sin embargo, estas tecnologías llevan décadas entre nosotros. Más allá de las que dominan actualmente, hay nuevos sistemas táctiles en desarrollo tratando de abrirse un hueco en el mercado.
El uso de las pantallas táctiles es bastante simple, en cambio la tecnología que hace posible que solo con un dedo podamos interactuar con una pantalla es compleja. Podemos diferenciar cuatro tipo de sistemas táctiles: sistema táctil capacitivo, resistivo, sistema de infrarrojos y tecnología táctil mediante sensores ópticos.
TIPOS DE SISTEMAS TÁCTILES
Capacitiva
Los sistemas táctiles capacitivos, que emplean la capacitive touch technology, basan su sistema en la creación de una capa cargada eléctricamente. De forma que al interactuar con ella se pueden medir los cambios y detectar las coordenadas X/Y donde se realizó el contacto.
De entre los sistemas táctiles que existen, el sistema táctil capacitivo es la tecnología táctil más común en la actualidad. Se emplea en las pantallas del iPhone desde su primera generación, y en la mayoría de dispositivos Android actuales.
Los sistemas táctiles capacitivos funcionan gracias a una superficie, generalmente de cristal, sobre la que actúa un campo magnético. Cuando algún objeto con capacidad de conducir electricidad entra en contacto con dicha superficie, se distorsiona el campo magnético. Esta distorsión es la que determina la posición en la pantalla.
La principal ventaja de este sistema es que, al tener menos capas sobre la pantalla de monitor o del dispositivo, la visibilidad mejora y la imagen se ve más nítida. Otros beneficios clave de su uso son la elevada resistencia a agentes externos y la posibilidad de aplicar el sistema multitouch o de pulsaciones mútlitples, siempre sin sufrir retardo en las pulsaciones.
Resistiva
Los sistemas táctiles resistivos, que emplean la resistive touch technology, funcionan por resistencia eléctrica. Constan de dos capas, una que conduce electricidad continuamente, y otra que al entrar en contacto con la primera crea resistencia. Este punto de resistencia es el que determina el eje de posición. Aunque las pantallas resistivas tienden a ser menos sensibles, siguen manteniendo un lugar importante en el mercado, fundamentalmente porque son más resistentes que las capacitivas. Su diseño en capas también permite determinar niveles de presión sin elevar demasiado los costos.
La tecnología resistiva tiene la ventaja de que se puede usar aplicando cualquier objeto sobre la pantalla: un dedo, un lápiz, un dedo con guantes, etc. Además es económica, fiable y versátil.
Por el contrario, el empleo de varias capas de material transparente sobre la propia pantalla, da un resultado de luminosidad inferior. Otro aspecto a tener en cuenta es que el conductor de la pantalla táctil es sensible a la luz ultravioleta. Esto provoca que con el tiempo se degrada, pediendo flexibilidad y transparencia.
Uno de los principales inconvenientes que se les atribuye a las pantallas resistivas es su imposibilidad para detectar varias pulsaciones, aunque en la actualidad se está trabajando en tecnología multitoque para pantallas resistivas.
Aplicaciones habituales de la tecnología resistiva son:
> Dispositivos médicos portátiles.
> Industria liviana.
> Terminales de control de acceso.
> Aparatos electrodomésticos.
Marco IR o Cuadrícula
La tecnología Touch IR (Sistema de Infrarrojos) es uno de los primeros tipos de pantalla táctil inventada. Funciona mediante un entramado de LEDs infrarrojos dispuestos en el marco externo de la pantalla que apuntan en dirección de un receptor situado en el marco contralateral. Cuando un objeto, como puede ser un dedo o un puntero, obstruye la luz infrarroja en dirección al receptor, entonces se identifica dónde ha ocurrido el evento táctil, permitiendo al sistema localizar de forma exacta el lugar donde se ha producido el contacto.
La instalación de estos sistemas táctiles pueden hacerse mediante un cristal en cuyos marcos estén conectados los emisores-receptores infrarrojos, o bien colocar estos en el propio marco de la pantalla. Esta última opción permite, al no haber nada entre la pantalla y el usuario, que no haya una pérdida en la calidad de la imagen.
Otra de las ventajas de las pantallas con tecnología IR es su resistencia. Por contra, este sistema es muy sensible a falsas pulsaciones así como a la suciedad, ya que no necesita para activarse que sea tocada la pantalla. Así también, cualquier elemento extraño que entre en contacto con la pantalla podría interactuar con el sistema.
Aplicaciones habituales de la tecnología IR son:
> Autoescuelas.
> Clases interactivas.
> Control de tráfico.
> Demostraciones de producto.
> Halls interactivos.
> Kioscos en centros comerciales.
> Pizarras blancas en aulas, salas de formación.
> Punto de información en hoteles, aeropuertos, estaciones.
> Salas de control, juntas, presentaciones, recepción.
Otros tipos de pantallas:
Dispersiva
La base de esta nueva tecnología es la piezoelectricidad formada al tocar la pantalla. Cuando un objeto entra en contacto con otro objeto sólido, el golpe genera electricidad. Los sistemas dispersivos detectan dónde se originó esa onda eléctrica en la superficie de una pantalla. Lo que hace a estas pantallas superiores respecto a los sistemas capacitivos y resistivos es que no necesita capas sobre el panel, por lo que no se distorsiona la calidad de imagen.
Sistemas ópticos
La Tecnología Touch Mediante Sensores Ópticos se basa en la utilización de una matriz de sensores ópticos, que permiten registrar varios puntos de contacto, siendo registrados y analizados por el ordenador.
Aunque hay pocas implementaciones comerciales en la actualidad, es una tecnología que está creciendo en popularidad debido a sus grandes posibilidades y a la disminución progresiva de los costes. Dependiendo del tamaño del dispositivo, podemos encontrar algunas de estas pantallas lo suficientemente grandes para que puedan ser usadas por varios usuarios de forma simultánea. Otro aspecto importante se halla en que permite realizar zooms en la aplicación que se esté manejando con sólo usar dos dedos. Las investigaciones actuales van dirigidas a intentar calcular otros parámetros como, por ejemplo, saber qué dedo concreto es el que está tocando en cada una de las posiciones.
SAW (SURFACE ACUSTIC WAVE)
Estos sistemas se sirven de la denominada SAW (Surface Acustic Ware) o tecnología acústica superficial, basada en la utilización de ondas de ultrasonidos que se transmiten sobre la pantalla táctil. El fundamento es muy similar al de las pantallas dispersivas, solo que en lugar de electricidad formada por piezoelectricidad, hace lo propio con el sonido que se produce al contactar con la superficie de la pantalla. Las ondas acústicas no se transmiten de forma continua, sino por impulsos. Dos detectores, uno por el eje X y otro por el eje Y, reciben las ondas. Cuando la superficie de la pantalla es tocada por el usuario, el dedo de este absorbe una parte de la potencia acústica, produciendo un cambio y quedando así la onda acústica atenuada en su energía, siendo captada esa atenuación por los detectores. Gracias a ello, el controlador podrá procesar ese cambio y el sistema determinará las coordenadas X/Y del dedo.
Además de las coordenadas X/Y, la tecnología SAW es capaz de detectar el eje Z, es decir, la profundidad o la presión aproximada que se ha ejercido con el dedo, ya que la atenuación de la onda será mayor cuanta más presión se ejerza.
La desventaja de este tipo de pantallas es que diferentes objetos producen diferentes sonidos, y el polvo o láminas protectoras también pueden modificar el funcionamiento.
Aplicaciones habituales de la tecnología SAW son:
> Automatización de restaurantes y atención al cliente de retail.
> Terminales de retail.
> Automatización en farmacias.
> Automatización en oficinas.
APR (Acoustic Pulse Recognition)
La tecnología de Reconocimiento de Pulso Acústico, también conocida por las siglas APR, (Acoustic Pulse Recognition) se basa en detectar la frecuencia del sonido que produce un objeto cuando toca la superficie de la pantalla. Esta tecnología consiste en un vidrio con cuatro traductores piezoeléctricos instalados al reverso de la cubierta.
La nueva tecnología (APR) funciona de manera sencilla, reconociendo el sonido creado al momento del toque del vidrio en una posición determinada. Los traductores detectan la onda generada al momento de tocar la superficie para convertirla en una señal digital. La señal es entonces digitalizada por el controlador y comparada con un patrón pregrabado para cada posición del vidrio. La posición del cursor es instantáneamente actualizada a la localización que fue tocada.
Esta nueva tecnología utiliza una técnica totalmente nueva y única para registrar los pulsos en el monitor o pantalla. Consta solo de un vidrio montando al frente del monitor, ambos con una tarjeta electrónica controladora.
Ventajas: la tecnología APR combina lo último en calidad de imagen, durabilidad y estabilidad, con excelentes propiedades de activación tanto con puntero, uña o guantes y las ventajas propias del bajo costo. Además, es resistente al agua y otros contaminantes en la pantalla.
Aplicaciones comunes de la tecnología APR son:
> Automatización de restaurantes y atención al cliente de retail.
> Terminales de retail – (POS) Puntos de Venta.
> Automatización de farmacias.
> Automatización industrial.
> Automatización de oficinas.
FOIL (Lámina de capacitiva proyectada)
La Tecnología Táctil Foil se utiliza principalmente para instalarse en escaparates de tiendas, así como en cualquier aplicación para exterior ya que a la tecnología Foil no le afecta la lluvia, la nieve o el hielo y se puede tocar con el dedo o con cualquier tipo de guantes.
La tecnología táctil capacitiva proyectada basa su funcionamiento en dividir la pantalla en diferentes celdas usando hilos conductores ultra-finos (~0,010 mm de diámetro) instalados a través de la lámina táctil en vertical y horizontal y que son casi invisibles cuando el monitor está encendido. Estos hilos son conectados a un controlador y una oscilación de frecuencia es establecida para cada hilo. Cuando se toca el cristal, se crea un cambio en la frecuencia de los hilos y en un punto en concreto, punto que es calculado e identificado por el controlador.
Fácil instalación
Las pantallas táctiles ProCap Foil tienen como base una lámina de vinilo transparente (Foil) que se instala en cualquier punto de la parte interior del cristal del escaparate. Este cristal compacto puede tener hasta 16 mm de grosor y el grado de protección antivandálica que se precise. Una vez instalado el Foil, solo queda superponer por detrás un monitor TFT y la instalación queda lista para que cualquier usuario desde la calle maneje la aplicación multimedia correspondiente. Todas las pantallas táctiles incluyen una lámina «Static Cling» que facilita el montaje ó desmontaje de la pantalla táctil sobre el escaparate.
El Grupo EOS Ibérica tiene más de 25 años de experiencia como importador e integrador de componentes industriales. Por ellos, tenemos un amplio catálgo de productos en el que seguro que encuntras el sistema táctil que mejor se adapte a tus necesidades.