Quizás en más de una ocasión tienes la sensación de que los dispositivos inteligentes que tienes en tu casa hablan entre sí. Recientemente, una investigación ha demostrado que cuando uno de estos aparatos se conecta a la red wifi de nuestro hogar, reconoce a los otros aparatos y recopila información y datos de ellos.
Esta “comunicación” no solo se produce entre los dispositivos que tenemos en casa, sino que el denominado “Internet de las cosas” también está presente en nuestras calles y carreteras. Una de las tecnologías que está cambiando nuestra experiencia y mejorando la seguridad vial es la tecnología V2X.
En esta nueva entrada vamos a explicar qué es V2X, para qué sirve y las ventajas que nos brinda tanto cuando somos conductores de un vehículo como cuando somos peatones.
¿QUÉ ES LA TECNOLOGÍA V2X?
¿Te has preguntado alguna vez si los coches “hablan” entre ellos y con los semáforos y demás señales de tráfico? La respuesta es afirmativa. Aunque solo lo pueden hacer los denominados “vehículos conectados”. Este tipo de coches es un vehículo que cuenta con tecnología móvil integrada, por lo que se puede conectar a su entorno por medio de Internet. La tecnología que permite esta comunicación es la tecnología V2X.
Podemos decir que V2X, o Vehículo conectado a todo (Vehicle to Everything, en inglés), es como un “lenguaje secreto” entre los coches (V2V), entre estos y las infraestructuras viales (V2I) así como entre los vehículos y los peatones (V2NP).
Los vehículos que tienen integrada esta tecnología pueden “hablar” entre sí, con las señales de tráfico y los demás elementos de su entorno, lo que permite mejorar la seguridad vial y la eficiencia en nuestras carreteras.
¿CÓMO FUNCIONA?
Mientras tú vas conduciendo si tu coche tiene integrado este sistema, tu vehículo se comunica con las señales de tráfico y con otros turismos cercanos. Por ejemplo, si hay una retención unos metros más adelante, tu vehículo lo sabe y te avisa. ¿Cómo es posible que tu coche pueda conocer esta información? Gracias a la comunicación que se establece entre tu vehículo y el resto de coches que tienen instalados esta tecnología.
Te vamos explicar las diferencias que existen entre los diferentes tipos de sistemas V2X que existen:
V2V (Vehículo a Vehículo): esta tecnología posibilita que los coches intercambien información entre ellos, compartiendo información sobre su velocidad, ubicación, posición … Por ejemplo, dos vehículos se acercan a un cruce, los vehículos conectados intercambian información a través de V2V, alertándose mutuamente sobre su posición y velocidad. Si hay riesgo de que se produzca una colisión, los conductores reciben una alerta, permitiéndoles tomar la decisión más adecuada para evitar la colisión.
V2I (Vehículo a Infraestructura): este tipo de sistema permite el intercambio de información entre los vehículos y las señales de tráfico. A modo de ejemplo, imagina que tu vehículo se aproxima a un semáforo, esta tecnología permite la comunicación entre tu coche y el semáforo. El semáforo puede ajustar su temporización en tiempo real en función del flujo de tráfico, reduciendo los tiempos de espera.
V2P (Vehículo a Peatón): facilita la comunicación entre los coches y los peatones. Por ejemplo, un viandante lleva consigo un dispositivo V2P, su smartphone, mientras cruza una calle, su móvil inteligente intercambia información con los coches equipados con V2V y V2P, y los conductores son avisados de que hay un peatón en la carretera, lo que le permite tomar decisiones como reducir la velocidad.
V2N (Vehículo a Red): posibilita que los vehículos se conecten a Internet, lo que facilita la recopilación de información e intercambio de datos con centros de control de tráfico, por ejemplo.
VENTAJAS V2X
La principal ventaja, o una de las principales ventajas, de esta tecnología es que puede ayudar a prevenir accidentes de tráfico, al poder ofrecer información actualizada sobre el estado de las carreteras, volumen de tráfico o información meteorológica.
A continuación vamos a detallar algunos de los beneficios que V2X puede tener en la circulación vial:
Mejora la seguridad: al posibilitar que los vehículos se comuniquen con las señales de tráfico y con otros coches puede ayudar a prevenir accidentes tales como colisiones u otras situaciones de tráfico peligrosas.
Aumenta la eficiencia del tráfico: la comunicación entre los vehículos y los semáforos, por ejemplo, puede reducir los atascos y mejorar el flujo del tráfico rodado.
Mejora la experiencia del conductor: la tecnología V2X puede proporcionar información en tiempo real sobre condiciones de tráfico, peligros en la carretera y otros datos útiles para los conductores, lo que les puede ayudar a tomar decisiones informadas y a mantenerse seguros en la carretera.
Ayuda a reducir las emisiones: al optimizar el flujo del tráfico, se pueden reducir las emisiones de C02 al disminuir los tiempos de espera y las paradas innecesarias.
RSU y OBU, ¿QUÉ SON?
La tecnología V2X para su funcionamiento necesita de la ayuda de otros sistemas como las RSU (Roadside Unit) o Unidades en el Lado de la Carretera y de las OBU (On board Units)o Unidades a Bordo. Se tratan de dos tecnologías clave en los sistemas de comunicación V2X.
Las RSU o Unidades en el Lado de la Carretera no son otra cosa que los dispositivos instalados en la calle tales como semáforos, señales de tráfico o farolas. Estos elementos suelen estar conectados a una wifi y permiten la comunicación entre los coches y las diferentes infraestructuras de tráfico.
Las OBU o Unidades a Bordo son los dispositivos que se encuentran instalados en los vehículos. La función de las Unidades a Bordo es comunicar el coche con el semáforo, que tiene instalado la RSU (Unidad al Lado de la Carretera), por ejemplo. Las OBU pueden enviar y recibir datos relacionados con la velocidad, la ubicación u otros parámetros del vehículo. También, puede procesar la información que recibe del exterior, tomar decisiones automáticas, y evitar así un posible accidente de tráfico.
Como podemos deducir, la implementación de V2X junto con las tecnologías RSU y OBU tiene impactos muy positivos en nuestra vida cotidiana, y sobre todo, en nuestra conducción diaria. La tecnología RSU se instala en los semáforos, señales de tráfico y postes, que envían información a los vehículos que tienen instalados las Unidades a Bordo (OBUS). Esto se traduce en menos accidentes y menos atascos. En definitiva, viajes más rápidos y seguros para todos.
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